El Departamento de Justicia (DOJ) ha dado la voz de alarma: es inminente una ofensiva enérgica contra la mala conducta empresarial. Con un programa de aplicación en el horizonte, las empresas deben prestar atención a la advertencia y tomar medidas proactivas para fortalecer sus programas de cumplimiento.
Recientemente, el Departamento de Justicia ha dado a conocer sus planes para un innovador programa de denuncia de irregularidades que ofrecerá importantes recompensas económicas a quienes denuncien casos de corrupción y malas prácticas empresariales. Esta medida, destinada a colmar las lagunas existentes en los programas federales de denuncia de irregularidades, subraya el compromiso del Departamento de Justicia de erradicar los delitos de cuello blanco y la mala conducta empresarial.
El programa representa el último esfuerzo del Departamento de Justicia para incentivar a los denunciantes a facilitar información crucial. En particular, se persiguen los abusos criminales dentro del sistema financiero estadounidense, así como las infracciones de la Ley de Prácticas Corruptas en el Extranjero y de la Ley de Prevención de la Extorsión en el Extranjero. El mensaje es claro: ningún rincón de la prevaricación empresarial quedará sin control.
Mientras las empresas se preparan para la aplicación de la ley, la Vicefiscal General Lisa Monaco ha lanzado una dura advertencia: inviertan en programas de cumplimiento ahora o afronten las consecuencias más adelante. El imperativo es claro para que los directores de cumplimiento, los asesores generales y los abogados aconsejen a sus clientes que tomen medidas proactivas.
Pero el nuevo programa del DOJ no es el primero. Varios organismos federales llevan tiempo aplicando con éxito programas de denuncia o autodenuncia para fomentar el cumplimiento y la rendición de cuentas. Hemos elaborado una guía rápida de los principales programas de referencia.
En previsión del aumento de reclamaciones alentado por el programa de denuncias del DOJ, las empresas deben evaluar y reforzar sus programas de cumplimiento. Desde el tratamiento de las denuncias internas hasta la evaluación de riesgos y la aplicación de políticas, nuestra experiencia puede guiar a las empresas a través del intrincado panorama del cumplimiento normativo.
Al invertir en programas de cumplimiento exhaustivos y adoptar las mejores prácticas, las empresas pueden navegar por estas aguas turbulentas con confianza e integridad. Ahora es el momento de actuar y protegerse frente a posibles medidas coercitivas.